martes, 3 de diciembre de 2013

LA SOLEDAD DE LA NOCHE...

Son las 4'45 h. de la madrugada, suena el despertador, me cuesta levantarme, pero una vez consigo parar la cancioncilla del movil consigo poner ambos pies en el suelo, sigo sentado en la cama, por la cabeza se me pasan varios pensamientos pero el que con mas fuerza llama a la puerta de mi cerebroes el de..., pero que haces, para que te levantas con lo a gusto y calentito que se está en la cama, estas loco ahora salir a correr..., pero ese mismo pensamiento es el que mas me motiva para ello, para salir a la calle y a pesar del frio del calor de la lluvia, de la nieve da igual lo importante es devorar kilómetros. Me levanto, voy al baño y tras lavarme la cara y despejarme un poco, vuelvo al dormitorio y sin hacer mucho ruido para no despertar a Susi comienzo a vestirme con la ropa que previamente me he dejado preparada la noche anterior. Ya estoy preparado, me he abrigado mucho ya que estamlos en diciembre y hace mucho frio, asi que solo me queda calarme bien el gorro en la cabeza y darle a la aplicacion del movil para comenzar en entreno. Salgo al portal, veo que todavía es noche cerrada y que no me confundia ni lo mas minimo en cuanto al frio que hace, calculo no mas de -3° C, es tremendo el frio que hace, lo que en ese momento de debilidad que tengo es cuando ese pensamiento negativo que llamo a mi cabeza cuando sono el despertador para realizar otra intentona para que aborte el entreno, pero le vuelvo a dar con la puerta en las narices, mientras abro la puerta del portal. La puerta ya esta abierta, cojo el móvil y doy al boton de comienzo de la aplicacion gps que me va a controlar el entreno, ya no hay vuelta atrás, acabo de comenzar el entreno. Ya estoy en la calle, las primeras zancadas me cuestan un poco, son las mas duras hace mucho frio y sopla un ligero viento, asi que me subo la braga bien para taparme las orejas y la boca. Llevo aproximadamente unos 50 m. Desde que sali del portal de casa y parece que lleve una Media Maraton, pero hay que continuar y esto no ha echo nada mas que comenzar. La preocupación del frio ya ha pasado ahora solo tengo en mi cabeza el coger el ritmo, mi ritmo, mi zancada, esa con la que voy a sentirme bien, y parece que lo voy consiguiendo. Miro uno de los relojes de las paradas de autobuses, esos de los que además de dar la hora también informa de la temperatura y lo he clavado pone que hay -3°C, cuando lo veo pienso que frio hace, pero continuo zancada a zancada arrebatando al asfalto un metro tras otro para convertirlos en kilómetros, un leve viento sigue golpeando mi rostro lo que hace aun si cabe que la sensación termica sea casi polar, aunque la fuente que adorna linealmente el parque tenga toda su agua congelada, no la oigo correr como pasaba este verano pasado, el grosor del hielo es tal que casi parece que se pueda patinar sobre el, que frio hace. Continuo paso a paso, zancada a zancada, una respiración tras otra sigo devorando asfalto, asi es como el entreno va prosperando, ya queda poco para llegar al final del mismo, hoy no va a ser mucha distancia. El final ha llegado mi mente esta dividida, una parte me dice que menos mal que hemos terminado y que ha sido infernal la decisión de salir a entrenar y otra parte de mi mente me dice que todo ha terminado muy pronto, que siga corriendo. El entreno termina con tan solo 8 kms. en tan solo 30', ha estado bien y las sensaciones han sido buenas ha pesar de ser el primer entreno después de 10 días en el dique seco tras una tonta e inesperada lesión. Corta distancia pero no tengo tiempo de mas, ahora tengo el tiempo justo para afeitarme, ducharme, desayunar, y salir camino del trabajo donde me espera una jornada laboral de no menos de 12 h. pudiendo llegar incluso a las 16 h., mucho estress y pero antes de todo esto no puedo dejar de realizar una buena sesión de estiramientos. En los 30' que ha durado hoy el entreno no me cruzado con ningún otro ser humano ni del reino animal, me siento por momentos como si fuera el único superviviente en el mundo después de una guerra nuclear, pero esa sensación la pierdo cuando solo muy de vez en cuando oigo el ruido de un coche que rompe por instantes el silencio que me acompaña y que es mi fiel compañero cada mañana en mis entrenamientos mañaneros tempraneros como los llamo yo. Ahora los estiramientos los hago frente al portal para resguardarme del frio, los intento realizar muy bien pero rápido para no quedarme frio y entrar en casa lo antes posible. Esto es un entrenamiento tipo mio de los de las 5 de la madrugada, esos que para mi son motivo de orgullo, satisfacción, aumento de autoestima, pero sobre todo una terapia anti estress y anti obesidad a causa de mi hipertiroidismo que a pesar de estar controlada de vez en cuando hace de las suyas. Pero quitando algunas personas de mi familia como mi mujer y mi madre, todos los demás de mi entorno, y de fuera de el cuando se enteran de lo que hago y como y cuando lo hago dicen que es una locura, y todos tienen millones de argumentos y de excusas para no hacerlo, pero lo mas gracioso del tema es que un gran porcentaje de los que lo hacen no es para meterse conmigo si no justificandose ellos mismos de por que ellos no lo hacen y nunca lo harían. Yo unos días puedo estar mas cansado que otros pero el mero hecho de levantarme salir a correr y empezar el dia con esa satisfacción de estar como con el deber dentro del ocio cumplido, esos amig@s mios solo pudiera ser comparable con un par de cosas en esta vida como es el comer chocolate y el sexo, y para mi y a pesar de como se meten conmigo primero por correr, seguido por hacerlo a esas horas y con esas temperaturas y el como te sientes después, eso amig@s no tiene precio.